lunes, 22 de agosto de 2011

La evaporación permite separar un líquido de un sólido disuelto en él, mediante el caloro la disminución de la presión (véase: punto de ebullición y presión de vapor). Para que este método funcione el sólido debe ser no volátil, de lo contrario se sublimará. Al final del proceso el líquido se ha transformado en gas y el sólido no volátil queda en el fondo del recipiente, en forma de cristales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario